El misterio.
Un tal día como hoy, un niño de dieciséis años llamado Adrián se fue a vivir a
casa de de sus abuelos, ya que sus padres se iban a trabajar a Portugal.
Al poco tiempo de estar con sus abuelos le dijeron que nunca bajara al
Sótano, le dieron una extraña e infantil excusa que había ratas pero Adrián no
se lo creía.
El primer día de colegio en aquel pueblo sus compañeros de clase le
comentaron que esa casa estaba maldita y que en el sótano había algo
siniestro y tenebroso esa era la leyenda que circulaba por el pueblo, Adrián
quería demostrar que todo era falso, no le gustaba nada que se contaran
mentiras sobre la casa donde vivía. .
Un sábado por la mañana, Adrián es un chico muy curioso, le encantaba
investigar, buscando por los libros viejos de su abuelo encontró el diario de
su tío leny, un libro viejo con una portada de un faro, no tenía nada dentro o eso
parecía, sus abuelos decían que su tío se marcho al extranjero a buscar
trabajo y nunca volvió.
Dentro del diario, había un mapa, decidió al día siguiente, seguir el mapa y
preparado con su mochila, una cuerda, una linterna y su navaja multiusos
cogio su bicicleta y se lanzo a la aventura de su vida, su primera para fue a un
que tenia en su corteza dibujado una gran piedra, siguió la pista y al rato
grande de pedalear, encontró una gran piedra, al subirse a la piedra, no veía
nada en el horizonte, había mucha niebla y no podía ver nada. llevaba una
gran rato, cuando ya las fuerzas flaqueaban y desesperado, vio como poco a
poco se veía al fondo un gran faro muy alto, era el mismo faro que tenia la
portada del libro de su tío, había que atravesar los acantilados, al llegar al
faro se asombro de lo grande que era, empezó a porrear la puerta de madera,
muy antigua con unas bisagras de hierro muy oxidadas, se abrió la puerta y
tras ella apareció un hombre alto con un gran bigote y el pelo muy alto.
quien eres?
Soy Adrián
Que quieres
Entonces Adrián le enseño el libro de su tío leny
De donde has sacado eso quien eres tú, que haces aquí dijo enojado
Encontré el diario de mi tío leny en la casa de mis abuelos
El hombre le miro y de sus ojos cayeron dos lágrimas que cambiaron el rostro
serio y malhumorado
eres sobrino de leny, si mi madre y leny son hermanos
el hombre le dio un abrazo a Adrián, espera tengo una cosa para ti,
entro en el faro y le dio un estuche, toma chaval, esto me lo dio tu tío antes
desaparecer, tengo cuidado con lo que haces.
Adrián lo abrió y vio que era una llave, ya se que es esto,
no me digas nada respondió el gran hombre, me llamo Edgar no lo olvides
acompáñame es del sótano de mis abuelos
lo siento chaval, se dio media vuelta y cerro la puerta del faro.
al volver para casa, no paro de darle vueltas a la cabeza, entro o no entro, no
sabia que hacer, esa e noche, no se atrevió a abrir la puerta del sótano y se
echo a dormir.
La mañana siguiente sus abuelos salieron temprano para hacer la compra,
entonces el aprovecho para bajar al sótano, al abrir la puerta le vino un fuerte
olor, empezó a bajar los escalones de madera que gemían a cada pisada, al
llegar al fin de la escalera, vio unas grandes arcones y neveras
estaban llenos de restos humanos, se asusto muchísimo y al subir a la
escalera se encontró de frente con los abuelos, empezó a gritar como un loco,
de repente el abuelo se quito una mascara que llevaba, no era su abuelo, era
un extraterrestre, Adrián se cayó por las escaleras y perdió el conocimiento.
al despertar se encontró en una mesa amarrado de pies y manos, su abuelo y
abuela estaban preparando para cortarlo, cuando de repente se escucho unas
pisadas por las escaleras, era Edgar el farero que llevaba una espada en la
mano y no paraba de gritar, al final de la lucha consiguió eliminar a los
extraterrestres .
Adrián no sabia como darle las gracias, a lo cual el farero le contesto “Por muy
difícil que parezca ,siempre hay alguien dispuesto a echarte una mano
Hoy en día aun nadie del pueblo sabe lo que paso en ese sótano, andrian se
fue a vivir con Edgar , ahora es el farero del pueblo
Historia dedicada a mi sobrina Maria , ella empezó la historia y yo la reconvertí
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